18 may 2010

Los e-readers o lectores de e-books vienen en auxilio de la literatura independiente.

Comienza a romperse en el mundo el paradigma del libro de papel. La natural resistencia al cambio y el lobby de la industria venían peinando el freno de la evolución de estos dispositivos, argumentando que podría fomentarse el robo de propiedad intelectual, la piratería de obras y razones de preferencia cuya conclusión aparente sería: “nunca se va a poder reemplazar al libro de papel”.

A decir verdad, el “nunca” es mucho tiempo y hay motivos ecológicos que le ponen algunas limitaciones temporales si esta conclusión fuese realmente cierta. La tecnología utilizada en el sentido correcto puede dar solución a la distribución de la literatura que no tiene chances de ingreso al mercado de las librerías y editoriales, en tanto corporaciones de posición dominante en la industria del libro.

Bastaría que la implementación profunda del habeas data, del control estricto del derecho de autor, y una red prolija y transparente de transacciones permita a toda persona publicar sus obras en Internet para quedar disponible a los lectores de todo el mundo y reciba a cambio un digno espacio para expresarse y recibir por esto lo que se ha propuesto, aunque solamente sea el reconocimiento del lector.

Por supuesto que copiar libros, reconvertirlos a formato e-book y comercializarlos es un delito, yo hablo de otra cosa, hablo de que el autor independiente, inscriba su obra en propiedad intelectual y obtenga su código ISBN, cuelgue su producción de un portal, regale o venda sus libros y perciba lo que corresponda por esto. Hablo del derecho a ser difundido y promocionado en las redes virtuales, a poder conversar con sus lectores, recibir críticas y elogios y también obtener su fee por ventas si es que así lo desea.

Hay una esperanza de que cualquier autor exponga en su propia red o comunidad su producción, teniendo procesadores de texto shareware con posibilidad de guardar en formatos epub .pdb .arg .azw .djvu .html .lbr .lit .mobi .opf .pdf .pdg .txt u otros.

Aparecerán las editoriales alternativas, grupos y blogs que facilitarán estas transacciones, porque es la parte mágica que nos depara el futuro, el empowerment, el tomar el destino en nuestras manos y hacernos cargo.

Marcelo Urbano

3 comentarios:

Teresa dijo...

Muy buena reseña Marcelo, y totalmente de acuerdo contigo.

Solamente apuntaría como reflexión para el sector editorial y el de las nuevas tecnología encargadas de producir los e-readers, el intentar homogeneizar los tipos de archivo o formatos para las descargas de los e-books, porque lo que no es práctico ni para autores, ni para lectores, es tener tanto diversificación de formatos ( epub. pdb.arg, etc..), que en mi opinión sólo esta ralentizando el proceso de apertura y consolidación del mercado de la venta de libros electrónicos.

Un saludo!
Teresa

Marcelo G. Urbano dijo...

Es cierto Teresa, porque la competencia industrial está enclavada en el hardware: Cybook, Sony Reader, iLiad, HanLin, STAReBOOK, FLEPia, Kindle, todavía la batalla está librándose entre tecnólogos.
Como autores, tenemos un camino transversal que es el del formato PDF, que es fácil de obtener y también hay conversores como el Calibre 6.5 que es gratuito y te permite pasar a varios formatos.
En síntesis, hay que mirar con optimismo la aparición de estos dispositivos, porque si se incrementa la demanda baja el precio y podemos acceder facilmente a dimensiones que nos estaban negadas en el formato de papel. Creo que el gran público tendrá su e-reader, más tarde o más temprano. Los autores independientes debemos aprender a formar parte de la oferta y depende exclusivamente de nuestro propio esfuerzo.
Como siempre, sigamos debatiendo que vamos a ir inspirando a otros.
Saludos cordiales
Marcelo

Bienvenido dijo...

muy bueno tu aporte Marcelo, me parece muy positivo el surgimiento de estas nuevas formas de expresión, es bueno que se difundan,siempre y cuando se les de el uso adecuado.Saludos